Ahora o nunca…

Casi una frase de cajón, pero se ajusta perfectamente a la situación actual de la Selección Colombia; sí, son seis puntos, cuatro para algunos optimistas o el mundial del 2010 será un espejismo para un país que ya desde 1998 no asiste a una competencia como estas.

El combinado patrio a cargo en esta ocasión de Eduardo Lara, está conformado por jugadores muy jóvenes que con el complemento de hombres como Gerardo Bedoya, Mario Yepes y Agustín Julio, buscan brindarle las seis unidades a los colombianos y de nuevo soñar con asistir a un Mundial de Fútbol.

Una nómina tipo para el primer compromiso entre colombianos y bolivianos en el Estadio El Campín, estaría conformada por David Ospina, Camilo Zúñiga, Cristian Zapata, Mario Yepes, Pablo Armero, Abel Aguilar, Fabián Vargas, Vladimir Marín, Macnelly Torres, Darwin Quintero y Falcao García.

De la nómina titular, sólo tres superan los 25 años (Mario Yepes – Vladimir Marín – Fabián Vargas), lo que demuestra que la renovación en el plantel se está evidenciando.

David Ospina por fin es titular por encima del francés Letizi y se ha convertido en una promesa para el fútbol galo; Camilo Zúñiga, Cristian Zapata y Mario Yepes, son titulares indiscutidos en sus clubes italianos; Armero llegó al Palmeiras y tiene toda la confianza de su técnico; por su parte Abel Aguilar es el jugador que tiene menos pergaminos en la Selección, pero cuenta con el apoyo incondicional de Lara; Vargas se ha convertido en uno de los mejores volantes mixtos del continente y uno de los más ganadores con Boca; Marín ha descrestado a los paraguayos con su pegada y ya ganó un título con Libertad; Macnelly ya es respetado en Colo Colo y la hinchada ya lo tiene entre sus preferidos; arriba parece que todo se está dando, Darwin ha convertido seis goles en las últimas semanas con su conjunto mexicano, Santos y Falcao es uno de los pocos que se salvan de la crisis de su equipo y ha llegado a ser capitán de River Plate, con esta nómina la ilusión incrementa y el mundial ya parece estar más cerca y no ser más un sueño.